Cromañón, una herida que aun duele


Los familiares y amigos armaron un santuario fuera del ex boliche.

Han pasado 20 años de la que se conoce como la Masacre de Cromañón, el incendio de un boliche en pleno barrio de Once a finales de 2004. Una noche de terror donde 194 jóvenes perdieron la vida en lo que era un recital de la banda Callejeros. 

Además, hubo 1400 personas heridas, muchas con diversas secuelas físicas y psicológicas. Casi todos los fallecimientos se produjeron por la inhalación de monóxido de carbono y ácido cianhídrico, y cerca de la mitad por haber regresado al boliche a intentar ayudar a otras personas.

Luego de lo sucedido, las y los sobrevivientes, junto a familiares de las personas fallecidas, conformaron un amplio y diverso colectivo de movilización en demanda de memoria y justicia.

Este acontecimiento dio cuenta de la importancia de las políticas de cuidado y las obligaciones del Estado al respecto. 

En ese sentido, podemos citar que de todos los juicios llevados a cabo por los familiares de las víctimas contra los responsables de los hechos, la corrupción y las coimas fueron protagonistas.

 "En ningún momento se ocuparon de inspeccionar el local ‘Cromañón’", dice uno de los fallos que condenó a tres funcionarios del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. En otra de las causas se descubrió un sistema donde tres bomberos cobraban coimas para habilitar locales. El último de los juicios, realizado en 2016, alcanzó al inspector que habilitó el local en 1997: las irregularidades detectadas en ese momento era prácticamente iguales a las que tenía el lugar el 30 de diciembre de 2004. 

“Al estar el establecimiento colmado de gente, en cantidad excesivamente superior a la permitida, y con sus salidas en parte obstruidas y en algún caso ‘clausurada’, y tomando en consideración que al instante de iniciarse el incendio se cortó la luz de la parte interior del local, denotan el peligro al que se vieron expuestas las personas”, estableció en uno de sus fallos el Tribunal Oral en lo Criminal N°24.

De acuerdo a un informe citado en el fallo condenatorio, para junio de 2003 alrededor de un 70% de los locales de baile de la Ciudad no poseía instalaciones contra incendios y un 20% nunca había actualizado el certificado que otorgaba la Superintendencia de Bomberos.

Han pasado 20 años desde la masacre de Cromañón y como sociedad hemos aprendido que no podemos mirar hacia otro lado y que el incumplimiento de las medidas de seguridad, la connivencia y la corrupción pueden costar muchas vidas. 

Como jóvenes, en esta fecha conmemorativa decimos: ¡Cromañón: nunca más!

 

 Fuentes consultadas:

https://continuemosestudiando.abc.gob.ar/contenido/cromanon-nunca-mas/

 https://www.fiscales.gob.ar/fiscalias/a-15-anos-de-cromanon-un-repaso-de-los-juicios-que-analizaron-la-responsabilidad-estatal-en-la-tragedia/

 

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